Carolina Folgueiras posa junto a la Torre Perla Oriental, en Shanghai.

Carolina Folgueiras con su nieta y parte de su equipo de trabajo.

Varios contenedores aguardan ser transportados en dirección al puerto para luego ser enviados por mar a su destino final. Fotos cortesía de la entrevistada

DESDE pequeña, la salvadoreña Carolina Folgueiras supo que se dedicaría a los negocios. Su madre, a quien describe como “una mujer muy trabajadora”, que le dio las herramientas necesarias para convertirse en la mujer que es hoy, tuvo diversas tiendas a lo largo de su vida. Por ello, Folgueiras aprendió los gajes del oficio a temprana edad y, hoy por hoy, también se ha encargado de traspasar estas enseñanzas a sus hijos. Durante su infancia, vivió en Guatemala, donde su progenitora tenía una tienda llamada El Baratero y, tras su regreso a El Salvador, continuó incursionando en el rubro del retail con otros negocios como Super 10 y 15.

Una apuesta por Yiwu

Su primer acercamiento con China se dio cuando tenía 19 años, también motivado por la idea de hacer negocios. “Viajé por primera vez con un taiwanés, y fuimos a Japón, Hong Kong, Taiwan y Macao”, señala. En esta última ciudad, Carolina Folgueiras pudo ver a lo lejos la parte continental de China, lo que le despertó un interés inmediato. “Me paré sobre un arco, desde el cual podía ver los edificios. Yo quería ir y volar hacia China”, rememora. Su sueño se hizo realidad cuando en 2003 llegó de forma definitiva. Tres años más tarde, arrancó con su propia empresa y una oficina en la emblemática ciudad de Yiwu, en la provincia de Zhejiang. Pese a haber visitado decenas de ciudades, incluidas Hangzhou, Suzhou, Shanghai, Sanya, Guangzhou, Harbin, entre otras, la empresaria salvadoreña apostó por Yiwu por el potencial que ofrecía. “Me quedé en Yiwu porque es el paraíso para las personas que les gustan los negocios”, afirma. Dividido en cinco secciones, el Mercado de Comercio Internacional de Yiwu es el mayor centro mayorista del mundo y, como tal, ofrece una cantidad inimaginable de productos en sus más de 75.000 puestos a lo largo de 4 millones de metros cuadrados.

En la actualidad, la compañía funciona como una empresa familiar, en la que todos cumplen un rol clave. Sin embargo, hasta aquel momento, los hijos de Carolina Folgueiras seguían en su país natal. “Había dejado a mis dos hijos en El Salvador, pero quería traérmelos. No quería que ellos vivieran esa vida día a día, ya que la delincuencia era terrible; todos los días mataban, robaban o extorsionaban”, recuerda. Por fortuna, aquellos años han quedado atrás gracias a una serie de políticas contra la inseguridad y, en específico, contra el crimen organizado y las pandillas, impulsadas por el presidente salvadoreño, Nayib Bukele. Este clima de mayor seguridad también ha beneficiado a la propia empresa de Folgueiras, por cuanto recibe cada vez más pedidos del país centroamericano y ha crecido la inversión.

A lo largo de los 20 años a la cabeza de la compañía exportadora Salem Limited, la empresaria ha logrado amasar una carpeta de clientes fieles que han premiado sus buenos servicios, consistencia y honestidad a lo largo de los años. Por ello, además de exportar a El Salvador, Folgueiras también manda contenedores a Guatemala, México, Panamá, Honduras, Colombia, Estados Unidos, España e Italia. “La empresa puede mandar productos a cualquier parte del mundo, así como el producto que necesite el cliente”, asevera. “No hay límites, ya que China es muy grande y tiene fábricas en muchas ciudades”.

La cosecha del éxito

Durante los últimos años, el negocio ha visto un crecimiento notable. Sin embargo, la empresaria es clara en señalar que esto no se debe a un hecho fortuito, sino a años de esfuerzo y experiencia in situ. “Tener a mis clientes satisfechos es mi mejor carta de presentación, ya que ellos mismos me recomiendan, y trabajar con mi familia es el mayor éxito”, manifiesta. La empresa, que también cuenta con una oficina en El Salvador desde 2016, mueve aproximadamente 100 contenedores al año, por una inversión de más de 2 millones de dólares. El año 2023 fue particularmente bueno, con un incremento del 20 % respecto al año anterior. Por otro lado, la salvadoreña explica que en el pasado solo mandaban contenedores completos, mientras que en la actualidad también envían carga consolidada (un tipo de carga que combina envíos de varias compañías, de modo que se pueden compartir los costos de transporte y el espacio en un mismo contenedor) desde su origen al destino final.

Sin embargo, todos estos éxitos no habrían sido posibles sin la ayuda de la familia de Carolina Folgueiras, quienes no solo actúan como su mano derecha en el negocio, sino que además son su principal pilar emocional. Hablamos de su actual marido, sus dos hijos, su nuera y su nieta. “Como madre, siempre fue mi sueño que toda la familia estuviera junta”, dice al respecto. De este modo, hoy todos trabajan codo a codo, con su marido como responsable de la bodega y la revisión de productos, un hijo que trabaja en la oficina llevando las cuentas, otro atendiendo clientes y visitando fábricas, y ella misma al pie del cañón supervisando el grueso de las operaciones y hasta los detalles más minuciosos. Por lo mismo, su agenda está siempre repleta de actividades, que se suman a los viajes que debe realizar regularmente. “Mi día a día empieza muy temprano, haciendo trabajo de oficina, coordinando pedidos, hablando con fábricas, dirigiendo a todo el personal, y siendo jefa, esposa, madre, abuela y suegra”, afirma.

Si bien ha habido tropiezos y dificultades en el camino, Carolina Folgueiras se siente infinitamente agradecida por las posibilidades que le ha abierto China. Incluso, pese a tener visado para Estados Unidos y la posibilidad de residir allá, prefirió apostar por China. “Al venirme a China, encontré seguridad y personas buenas que me dieron su respaldo, amistad y ayuda”, dice con relación al trato que ha recibido de la gente local. Por otro lado, a la salvadoreña le impresionan los cambios y el crecimiento vertiginoso que ha tenido el país con el pasar de los años, tal como ha ocurrido en la misma ciudad de Yiwu. “Lo que más admiro de China es el desarrollo que han tenido las ciudades y las personas. También el hecho de sacar a tantos millones de la pobreza es increíble, sus avances en tecnología, cómo los chinos aman su país, lo emprendedores que son y cómo se ayudan entre sí”, manifiesta.

Carolina Folgueiras es un claro ejemplo de que cuando existe la voluntad para salir adelante, es posible llevar a cabo los sueños. A pesar de los obstáculos que le puso la vida, como el haber perdido primero a su madre y luego a su primer esposo, además de las mismas barreras que supuso abrirse camino en un entorno nuevo, la empresaria siempre se encargó de no rendirse. Además, ha insistido en aprender todo lo que ha estado a su alcance y que pudiera ser útil a la hora de hacer negocios, por lo que ha tomado cursos de inglés, mandarín, Excel, relaciones humanas, etc. “Quiero decirles a todos los emprendedores con sueños que tomen mi ejemplo, de cómo siendo huérfana, viuda, no hablar mandarín y venir de un país tan pequeño como El Salvador, tomé la decisión de abrir una empresa internacional en China con la cual exporto productos a todo el mundo”, manifiesta.

Hace poco más de seis años, China y El Salvador establecieron relaciones diplomáticas, el 21 de agosto de 2018. Menos de un año después, el 1 de junio de 2019, asumió el actual presidente salvadoreño, Nayib Bukele, quien se ha convertido en un referente no solo a nivel regional, sino también en otras partes del mundo por la férrea batalla que ha dado contra la delincuencia, que ha situado a El Salvador como el país más seguro de América Latina. En consecuencia, Carolina Folgueiras ya no siente el miedo que solía tener cada vez que regresaba, y espera seguir consolidando las operaciones de su empresa en su país natal, destino de casi el 70 % del cargamento que manda al exterior. Asimismo, los crecientes nexos entre China y otros países de América Latina, incluyendo la reciente apertura del puerto de Chancay, en Perú, que ha reducido el tiempo de tránsito en aproximadamente 10 días, han volcado su mirada hacia otros lugares. En este contexto, dice que espera “seguir creciendo a nivel internacional, conquistar nuevos mercados en el mediano plazo y expandirme a América del Sur”.