14 de febrero de 2024. Juguetes culturales innovadores inspirados en las ruinas de Sanxingdui en el “Encuentro con la antigua cultura Shu: Exposición inmersiva de arte con luces y sombras en Sanxingdui”, llevado a cabo en el Museo Encuentro de Beijing. Wei Yao

DURANTE su viaje a Beijing a principios de junio, Laura Li, profesora de la provincia de Jilin, en el noreste de China, visitó el Museo Nacional de China específicamente para observar de cerca una corona de fénix, una pieza de renombre en la colección de dicha institución. La corona de fénix fue usada por la emperatriz Xiaoduan, esposa del emperador Wanli (que reinó de 1563 a 1620) de la dinastía Ming, durante su visita y ofrendas en el templo ancestral.

La corona, desenterrada en 1957 de la tumba Dingling del emperador Wanli, una de las Tumbas Ming en Beijing, presenta un diseño distintivo a la vez que ostenta la exquisita artesanía de mediados y finales de la era Ming. Adornada con alrededor de 4000 perlas y 115 piedras preciosas, también está decorada con motivos de nueve dragones y nueve fénix, con cordones de cuentas colgantes que se mecen con el movimiento. Por otra parte, la base está cubierta de vibrantes plumas de martín pescador azul, un detalle excepcional y lujoso que crea un efecto brillante, similar al de una joya.

Tras observar la exposición, Li esperó en la fila durante casi 30 minutos para comprar dos imanes para el refrigerador inspirados en el citado artefacto. Estos imanes han sido un éxito rotundo desde su lanzamiento en julio de 2024, y su popularidad se ha mantenido durante meses.

“Me atrajeron las publicaciones sobre estos imanes en las redes sociales. Muchos jóvenes como yo se sienten atraídos por su delicado diseño y la cultura que los rodea”, declaró Li al semanario Beijing Review.

Los dos tipos de imán están hechos de madera y metal, respectivamente. Asimismo, se puede escanear un código QR en el imán metálico para experimentar el efecto de realidad aumentada. El museo también ha presentado otros productos derivados basados en la corona, como llaveros y cajas de música.

En años recientes, los productos culturales creativos se han convertido en un éxito de moda entre los jóvenes chinos, impulsando enfoques innovadores para la promoción cultural y creando un mercado sustancial. Destinos turísticos populares, como museos y zoológicos, se están sumando a la tendencia de crear sus propios productos culturales mediante una reinvención de la cultura tradicional.

Frenesí cultural

Hace aproximadamente una década, el Museo del Palacio de Beijing y el Museo de Dunhuang, en la ciudad homónima de la provincia noroccidental de Gansu, comenzaron a ofrecer productos culturales creativos basados en los artefactos de sus colecciones para atraer a los jóvenes visitantes. El primero albergó a 24 emperadores de las dinastías Ming y Qing (1368-1911) y contiene más de 1,5 millones de piezas o conjuntos de reliquias, mientras que el segundo cuenta con más de 13.000 artefactos y obras de arte, incluyendo valiosas reliquias de las Grutas de Mogao, un sitio declarado Patrimonio Mundial. Desde entonces, este innovador enfoque ha sido adoptado por otros destinos culturales a un ritmo creciente.

A los diseñadores de productos culturales del Museo Nacional de China, inspirados por las fotos de los visitantes posando con la corona de fénix de la emperatriz Xiaoduan, se les ocurrió la creación de colecciones de imanes para el refrigerador. Para recrear la corona de forma moderna, estudiaron registros históricos y adoptaron novedosas técnicas de cloisonné en miniatura y gemas sintéticas a fin de presentar los intrincados detalles, convirtiendo el antiguo tesoro en una obra de arte tangible y cotidiana.

Como consecuencia, se vendieron más de un millón de estos imanes en los primeros ocho meses de su lanzamiento, con ganancias que alcanzaron los 100 millones de yuanes (13,9 millones de dólares). Según informó el museo, las ventas de productos culturales creativos del museo en 2024 experimentaron un crecimiento interanual del 90 %.

Los productos inspirados en el famoso Caballo Volador, que se conservan en el Museo Provincial de Gansu, han sido todo un éxito desde 2022. Con expresiones faciales adorables y ligeramente divertidas, el caballo de bronce, una reliquia de la dinastía Han (202 a. C.-220 d. C.), ha cobrado nueva vida al transformarse en una gama de artículos como llaveros de peluche, sombreros y marcapáginas.

De igual manera, el Museo Provincial de Gansu también ha presentado recuerdos con especialidades locales, como el malatang, una comida callejera a base de carne y verduras hervidas en aceite de chile. En la tienda de regalos del museo, los consumidores pueden elegir ingredientes para peluches, como brócoli o albóndigas, tal como lo harían en un restaurante de malatang.

Los productos culturales creativos con temática de zaojing del Museo de Arquitectura Antigua de Beijing, presentados por primera vez el año pasado, también han causado furor. Como elemento arquitectónico distintivo de los templos o palacios de la antigua China, el zaojing, o techo artesonado, es un panel ornamental hundido en un techo o cúpula. Talladas y construidas con maestría, las decoraciones del techo se han mantenido intactas con el paso del tiempo.

El imán presentado por el museo recrea el artesonado celestial de los antiguos palacios mediante cinco capas apilables. Cada una de ellas reproduce fielmente la auténtica estructura zaojing, lo que permite exhibir las capas por separado o ensamblarlas para formar una cúpula completa. La base, con motivos estelares, emite un suave brillo en la oscuridad e imita los techos astronómicos de los templos Ming.

Cada vez más museos colaboran con productores de cultura pop para impulsar el desarrollo de sus productos culturales. En diciembre de 2024, el Museo de Sanxingdui, en la provincia suroccidental de Sichuan, colaboró con el operador del juego de roles chino Genshin Impact para exhibir sus reliquias culturales en el juego.

Se cree que las ruinas de Sanxingdui son los restos del antiguo Reino Shu, que prosperó hace unos 3000 años. Entre los descubrimientos realizados en el sitio se encuentran máscaras de bronce y un árbol sagrado de bronce de casi cuatro metros de altura.

Las ventas de productos culturales creativos representaron el 39 % de los ingresos anuales totales del Museo de Sanxingdui en 2024 y alcanzaron los 220 millones de yuanes (30,6 millones de dólares).

Zootrópolis

Mientras que los museos acercan la historia a los jóvenes consumidores, los zoológicos también desarrollan productos culturales inspirados en animales para atraer visitantes y concienciar al público sobre la protección del medio ambiente.

El Zoológico Forestal Hongshan en Nanjing, capital de la provincia de Jiangsu, en el este de China, es una popular atracción turística que recibió alrededor de 8 millones de visitantes el año pasado. Su mono estrella, Du Du, un saki macho de cara blanca, se ha convertido en una calcomanía de moda en línea desde 2023 debido a su distintiva apariencia que provoca risas.

La tienda de regalos del zoológico ha lanzado una colección de llaveros de peluche con sus animales, disponibles en varios tamaños y poses. Si bien la entrada al zoológico cuesta 40 yuanes (5,5 dólares), muchos visitantes gastan hasta diez veces esa cantidad en productos culturales creativos. Gracias a la venta de estos productos, los ingresos del Zoológico Forestal Hongshan superaron los 100 millones de yuanes (13,9 millones de dólares) en 2024.

El zoológico ha ofrecido más de 1000 productos culturales creativos. Hasta la fecha, se ha asociado con más de 50 marcas, como la franquicia de té de burbujas Heytea, para lanzar productos de marca compartida.

El zoológico también ha organizado desfiles de moda y eventos de lanzamiento de productos para transformar la imagen tradicional de los zoológicos, ofreciendo experiencias diversas a visitantes de todas las edades.

Impulso del crecimiento

En 2024, el Ministerio de Recursos Humanos y Seguridad Social incluyó al planificador de productos culturales creativos entre las 19 profesiones recientemente reconocidas. A finales del año pasado, más de un millón de personas trabajaban en la industria cultural creativa del país.

Xiang Yong, decano del Instituto de Industria Cultural de la Universidad de Beijing, declaró a Beijing Review que los productos culturales creativos aportan un valor emocional a los consumidores cuando los compran como regalo o recuerdo, lo cual les brinda una satisfacción psicológica y los beneficios de la autoexpresión.

“Los diseñadores de productos culturales creativos que trabajan en museos deben poseer un profundo conocimiento de la historia, los lenguajes visuales y las técnicas narrativas. Sus diseños deben servir de puente para que las reliquias culturales conecten con el público moderno”, sostuvo.