NACIDO en 1936 en la ciudad sureña peruana de Arequipa, Mario Vargas Llosa creció sin conocer a su padre, quien abandonó a su madre embarazada. No fue hasta casi los diez años que su padre reapareció, imponiendo una autoridad violenta que marcó al joven Vargas Llosa con el dolor del poder arbitrario. Esta experiencia inspiraría el tema recurrente en su obra: el análisis de los mecanismos del poder. Su padre lo envió al Colegio Militar Leoncio Prado, en Lima, para sus estudios secundarios. Allí, Vargas Llosa descubrió un microcosmos de la sociedad peruana, con cadetes de diversas razas y clases sociales, donde imperaba la ley del más fuerte. Esta vivencia dio origen a su primera novela, La ciudad y los perros.