EN 2014, el presidente Xi Jinping propuso la construcción de un nuevo patrón de relaciones entre China y América Latina y el Caribe (ALC) basado en un todo compuesto por cinco elementos, incluido el “aprendizaje mutuo en los ámbitos humanos y culturales”, y construir una comunidad de futuro compartido en la que China y ALC avancen de la mano. Por ende, en los últimos diez años, los mecanismos de los intercambios humanos y culturales se han fortalecido continuamente, con campos cada vez más amplios y contenidos cada vez más ricos.